La rinoplastia secundaria es la que se realiza por segunda vez, aunque a veces se hace por tercera o incluso por cuarta.
La principal razón para llevarla a cabo es la insatisfacción con el resultado de la rinoplastia primaria, o bien por alteraciones respiratorias, traumatismos…
La corrección de la nariz ha de limitarse al defecto, siempre que sea posible. Los defectos más frecuentes en el dorso nasal después de una rinoplastia primaria son:
Supratip
Es el aumento de volumen en la zona de intersección entre la punta y el dorso. Provoca una pérdida de definición de la punta o una elevación deformante que se denomina nariz en pico de loro. Es una alteración que aparece con mayor frecuencia en pacientes con piel muy gruesa, pero también puede deberse a otras causas.
Ensanchamiento del dorso
La dehiscencia ósea ocasiona un aplanamiento de la arista o borde anterior del dorso. Su corrección exige el tratamiento de la causa que lo motiva.
Desvío de la pirámide nasal
Es la persistencia de un desvío septal o la movilización asimétrica o el inadecuado posicionamiento de los fragmentos óseos. En casos leves el defecto puede ser corregido mediante raspado o disimulado con injertos de cartílago o implantes.
Infratip
Se trata de una alteración similar a la anterior provocada por el descenso o hundimiento entre la zona de intersección punta-dorso. Su corrección puede ser realizada mediante el tratamiento del supratip, con injertos de cartílago o inyección de hidrogel.
Nariz en silla de montar
Normalmente se debe a una resección excesiva de la giba ósteocartilaginosa del dorso aunque también puede ocurrir cuando se hunde esa estructura en la cavidad nasal. En casos extremos puede ser necesario la realización de un injerto óseo o a la colocación de implantes se gore-tex o silicona.
Signo del hachazo
Es una depresión angulada en el área de transición osteocartilaginosa del dorso. Su tratamiento puede ser realizado mediante la resección del exceso anterior del cartílago cuadrangular, la inyección de hidrogel o la colocación de injertos de cartílago para rellenar el defecto.
Línea de fractura evidente o escalón lateral
Es la manifestación externa de una osteotomía excesivamente alta en el dorso. Su corrección puede ser realizada mediante un delicado raspado del defecto, disimulada con la colocación de un injerto o hidrogel en las paredes laterales.
Irregularidades
Después de una rinoplastia no es infrecuente encontrarnos con irregularidades en la superficie del dorso nasal ocasionadas por restos o fragmentos de hueso o cartílago, por una cicatrización alterada del hueso o del tejido subcutáneoo motivadas por la presencia de un cuerpo extraño. Su tratamiento, según el caso, requerirá la inyección de corticoides locales, la exéresis, la resección o el raspado.
Evidente transición ósteo-cartilaginosa
Normalmente es debida a la luxación de los cartílagos triangulares provocada por el raspado poco cuidadoso de la porción caudal de los huesos propios. Es más frecuente en los casos de pacientes con huesos propios cortos y puede ocasionar colapso de la válvula cartilaginosa y dificultad respiratoria. Cuando no comporta alteraciones funcionales suele ser suficiente la colocación de un injerto de cartílago o la inclusión de hidrogel, mientras que en los pacientes que presentan dificultad respiratoria será necesario resolver el problema mediante la inclusión de injertos expansores.
Dorso en arista
Es provocado por una o varias de las siguientes deficiencias quirúrgicas: resección excesiva del borde anterior de los cartílagos triangulares, resección o raspado exagerado de la porción ósea y deficiente resección de la arista anterior del septo. Su tratamiento varía dependiendo del resultado que queramos obtener. En los casos leves puede ser muy útil la inyección de hidrogel.